CONFIANZA FALSA

Living Word Christian Center By CMB Ministries


CONFIANZA FALSA

 

Así dice el Señor: ¡Maldito el hombre que confía en el hombre! ¡Maldito el que se apoya en su propia fuerza y aparta su corazón del Señor! - Jeremías 17:5

 

¿En quién has confiado? Esta es una pregunta clave para todos los que desean vivir por fe en Dios. Infelizmente, somos excelentes sustituyendo nuestra confianza sincera en el Señor por lo que está delante de nuestros ojos, las cosas materiales, nuestra propia fuerza o la de otros. Cuando ponemos nuestra fe en cualquier cosa o persona que no sea Dios, estamos adoptando una confianza falsa y apartándonos del Señor.

El versículo de hoy nos alerta sobre esa fe fingida que deposita su confianza en los humanos o en los recursos de este mundo y que se distancia de Dios. Es una tendencia natural de la humanidad caída, separarse del Señor buscando respuestas en los ídolos humanos. Pero cada cristiano necesita tener a Jesucristo como el único objeto de su fe. Él es la verdadera esperanza, el autor y consumador de nuestra fe. Solamente en Dios seremos llamados benditos del Señor, por creer en él con verdadera confianza.

Abandona hoy la confianza falsa

  • Medita sobre quién ha sido el objeto de tu confianza: tus padres, tu jefe, tu cónyuge, tus hijos, tú mismo, los bienes materiales... Recuerda siempre esto: aparte del Señor, nadie es digno de una confianza total.
  • Retira la fe de la persona o cosa (dinero, por ejemplo) en quien has confiado más que lo que has confiado en Dios. Aquello que necesitas no vendrá por causa de la fuerza o de la voluntad humana, sino por la gracia y la voluntad de Dios.
  • Hasta que no deposites tu confianza 100% en Dios, te sentirás frustrado y herido porque nadie puede garantizar lo que solo Jesús puede hacer.
  • Ora y coloca al Señor en el centro de tu corazón. Confía y descansa en él. Él obrará (Salmo 37:4-5).
  • Busca conocer mejor a Dios, lee su Palabra a diario. Así verás cómo se fortalece tu confianza en él cada día.

 

Para orar: Señor Dios, perdóname por haber depositado mi confianza en otras cosas/personas y no en ti. Ayúdame a creer en ti de todo corazón y no en mi propia fuerza. Que tu Palabra me enseñe a confiar y a descansar en ti en medio de todas las adversidades de mi vida. Te agradezco porque tú eres bueno y fiel, eres digno de toda confianza y cuidas de mí. En el nombre de Jesús, amén.