Hermanos, el deseo de mi corazón y mi oración a Dios por ellos es para {su} salvación. Porque yo testifico a su favor de que tienen celo de Dios, pero no conforme a un pleno conocimiento. Pues desconociendo la justicia de Dios y procurando establecer la suya propia, no se sometieron a la justicia de Dios.
Porque Cristo es el fin de la ley para justicia a todo aquel que cree.
Romanos 10:1-4